Fumar puros es uno de esos rituales que no se negocian. Y Buenos Aires dispone de hermosos espacios tanto para comprar como para fumar puros acompañados de un delicioso ron, y hasta maridados con platos y otras bebidas especiales. Incluso, si no sos habitué de esta costumbre, podés vivir una experiencia más que agradable. ¡Vamos!
El día que recorras Recoleta, podés programar una visita a Prado y Neptuno justo cuando cae el sol, el lugar ideal para descansar las piernas y el alma. Ubicado en la esquina de Ayacucho y Posadas -en diagonal a la parte de atrás del Hotel Alvear-, esta tabaquería cuenta con una completa selección de cigarros cubanos, dominicanos, caribeños y mexicanos, además de los accesorios que acompañan el ritual como pureras, cortapuros y sumideros. Mientras que en la planta baja funciona la boutique, arriba se encuentra el bar donde se sirven whiskys, vodkas y rones. El plus: los dueños y los empleados del lugar están capacitados para sugerirte qué tipo de cigarro te conviene, qué tomar para acompañarlo y hasta qué comer para que el placer sea completo. MAIL
info: Abre de lunes a sábados de 10 a cierre. En Ayacucho 2134, Recoleta
Para sentirse como un magnate de los años veinte, Oak Bar es un auténtico club de caballeros ingleses, pero abierto a todo el público. Junto con su salón de paredes de madera tallada traídas desde Normandía y sus sillones de cuero, el bar ofrece una extensa carta de habanos donde no faltan los Montecristo ni los Partagás. La terraza, con vista a los jardines del Palacio Duhau, compone una gran puesta en escena para relajarse con un whisky escocés, un cognac, algún cocktail o un Martini. Los puros y las bebidas se guardan en la antigua caja fuerte del lugar que fue restaurada para funcionar como humidero. MAIL
INFO: Abre todos los días de 12.30 a 1 de la mañana y de jueves a sábados hasta las 2 de la mañana. En el Palacio Duhau, Av. Alvear 1661, Recoleta
Un nuevo concepto de tabaquería, más lejos de la figura del dandy y más cerca de un estilo más informal y relajado. Acá no hay madera, alfombras, ni cuero, sino salones vidriados que ofrecen vistas despejadas con mucho de reggae y bossa nova. Entre el surtido de puros, hay clásicos como los Cohiba, y los Romeo y Julieta, pero también sabrosas novedades como los dominicanos Santa María de las Américas -con una duración de veinte minutos-. Aquí, además de fumar y conocer gente local, podés comprar regalos como libros, juegos de mesa de lujo y una interesante variedad de pipas. El plus: hay ofertas y promociones para disfrutar la experiencia sin invertir fortunas. por fb
INFO: Abre de lunes a sábados de 10 a 20.30. En Juana Manso 800, Puerto Madero
Puros, cognac y chocolates, quizás no sea la fórmula de la felicidad, pero se le parece. Es lo que ofrece el espacio exclusivo del Hotel Alvear: un lujoso salón vidriado con vista a la esquina de Ayacucho -ahí donde se encuentra Hermés-. Con la atención puesta en puros cubanos, Montecristo y Partagás en su mayoría, el bar cuenta con una carta de más de cincuenta etiquetas de cognac y la línea completa de chocolates Lindt.
INFO: Está abierto todos los días a partir de las 18. En el Alvear Palace Hotel, Avenida Alvear 1891, Recoleta
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